Las presas y embalses requieren un mantenimiento constante debido a su exposición continua a condiciones extremas como humedad, presión hidráulica y erosión. Los trabajos verticales permiten acceder de forma segura y eficaz a zonas de difícil acceso, como taludes, muros de contención, aliviaderos o compuertas, sin necesidad de instalar estructuras auxiliares.
Nuestro equipo especializado realiza labores de inspección, limpieza, sellado de fisuras, instalación de sensores estructurales y refuerzos de hormigón proyectado. Estas intervenciones se adaptan a la orografía y condiciones del entorno, reduciendo tiempos de ejecución y minimizando el impacto ambiental.
Gracias a nuestra experiencia en entornos hidráulicos, ofrecemos soluciones a medida que garantizan la integridad estructural y el buen funcionamiento de estas infraestructuras críticas.
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